martes, 19 de julio de 2016

Toncho Pilatos - Toncho Pilatos (1973)


Alfonso Toncho Guerrero y su proyecto Toncho Pilatos, amenazaron en 1973 (sin cumplir) a la humanidad, con un incomparable LP lleno de su singular mezcla de psicodelia, hard rock progresivo y música regional mexicana. Tenían todo para comerse al mundo: actitud, presencia, buen sonido, una disquera grande tras ellos y excelentes canciones. Ocho en total, con puntos álgidos en "Kukulkán", "Tommy Lyz" (dedicada al comunista "Tom de Analco"Tomás Lizarraga Tirado), "Blind Man" y "The Last Dance" de casi quince minutos y muestra de que el Toncho Pilatos era una banda de otro nivel. Quienes los presenciaron en esta época, solo tienen palabras y frases que manifiestan una mezcla de admiración y aturdimiento. ¡¡¡Suertudos!!!

No hay, yo al menos no encuentro, absolutamente nada malo que decir de este grupo en lo musical. La sección rítmica es inigualable, el trabajo en la guitarra del hermano de Toncho, Rigo, es perfecto. Y la voz de Alfonso, aunque a veces inescuchable  debido a la mala producción del disco, casi alcanza el cielo.

Por ultimo, creo que es algo innecesario y pueril, las reivindicaciones que se hacen de este disco, mencionando o sugiriendo, que Bob Dylan o Jeff Beck eran fanáticos de la música del Toncho, con un dejo mas de leyenda que de cita comprobable. No le veo caso sumarle credibilidad y prestigio a lo que brilla con luz propia.

Un album esencial del Rock Mexicano 

miércoles, 13 de julio de 2016

La Comuna - No hay mañana / There'll Be Time / For Those Who Love / It's All Right (1971)

A medio camino entre el sermón religioso y el discurso propio de la izquierda latina sesentera. A medio camino entre la psicodelia y el folk californiano. Piensen en los Ultimate Spinach conociendo a la Nopalera más Joan Baez y tendrán una idea de lo que hablo. Su único EP grabado en 1971, es audaz, es persuasivo y esta ejecutado con brillantez. Un poco de espiritualidad y hermandad a un México rockero por momentos insustancial.

El misterio de porque no grabaron ningún disco, se resuelve en un texto de Victor Roura, en el que ademas se demuestra que a diferencia de sus contemporáneos (a excepción de Antorcha), su postura política era genuina: "En los setentas el grupo de rock La Comuna se negó, ante el director artístico de la Peerlees, a aparecer en el programa de Velasco, intitulado Siempre en Domingo, por considerarlo frivolamente banal, provocando la cólera del funcionario de la disquera que, enmuinado por los caprichos de los jovenzuelos, delante de ellos rompo las pistas que ya habían sido grabados en señal de una eficaz reprobación moral. La Comuna obviamente, se desintegro meses más tarde ante la falta de opciones laborales".

Escucha obligatoria